Para 6 personas
INGREDIENTES:
- 370 gramos de champiñones en conserva
- 500 gramos de brócoli
- 4 huevos
- 400 ml. de nata líquida para cocinar
- 1 diente de ajo
- 1 ramito de perejil
- 1 ramita de tomillo fresco (opcional)
- 1 pizca de nuez moscada
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Pimienta
- Sal
ELABORACIÓN:
Precalentamos el horno a 200oC.
Desgranamos el brócoli y dejamos solo
las flores.
En un recipiente amplio ponemos 2 dedos
de agua.
En el recipiente, ponemos el utensilio
que tenemos para la cocción al vapor; el agua no debe de tocar el utensilio.
Alrededor de este colocamos todas las
flores de brócoli. Ponemos el recipiente a fuego fuerte.
Cuando empiece a generar vapor tapamos,
bajamos el fuego, a fuego medio, y dejamos hacer durante 5 – 6 minutos.
Pasamos por agua fría para que no siga
la cocción. Reservamos.
Mientras se cuece el brócoli, laminamos
los champiñones previamente escurridos; picamos muy fino el diente de ajo y el
perejil.
Ponemos a fuego medio una sartén con las
dos cucharadas de aceite.
Cuando el aceite esté empezando a
calentar, añadimos los champiñones, el ajo y el perejil. Rehogamos durante 5
minutos, apartamos y reservamos.
En un recipiente hondo cascamos los
huevos y los batimos.
Una vez batidos, añadimos la nuez moscada,
la pimienta negra molida y la sal.
Añadimos la nata líquida y volvemos a
batir hasta que todo quede bien mezclado. Probamos de nuevo de sal y si fuese
necesario rectificamos.
Engrasamos con aceite una bandeja de
horno. Ponemos las flores de brócoli bien repartidas por toda la bandeja y
ponemos por encima y, también repartido, el sofrito de champiñón, ajo y
perejil.
Añadimos el batido de huevo y nata.
Espolvoreamos por encima, generosamente,
queso rallado.
Metemos la bandeja en el horno durante
20 minutos aproximadamente (teniendo presente que cada horno es diferente),
hasta que nos cuaje la mezcla.
Unos minutos antes de acabar, ponemos el
horno en posición grill y dejamos que la parte de arriba se dore un poco
teniendo cuidado de que no se nos queme.
Apartamos y servimos caliente.
Está
igual de bueno si lo comemos frío.
Si
no se tuviera ningún utensilio para la cocción al vapor nos puede servir un
colador grande.
También
se puede cocer el brócoli directamente en agua.
Podemos
ponerle en el momento de añadir la pimienta y la nuez moscada unas hojas de
tomillo fresco. Igualmente, al finalizar, podemos decorar el plato con hojas de
tomillo.
Hemos
utilizado un champiñón que teníamos en conserva pero lo ideal es utilizar
champiñón fresco.
Para
realizar la receta íbamos a utilizar 2 huevos y 200 ml de nata; pero al ver que
no nos iba a cubrir bien el brócoli, hemos duplicado la cantidad.
Si no tenemos nata líquida se puede utilizar leche, preferiblemente entera.
Tampoco
le íbamos a poner queso rallado, pero hemos pensado, que podríamos mejorar la
receta si lo añadíamos.
La
mezcla de huevo y nata debe de estar bien de sal ya que es la única que lleva
la receta.