Para 2 personas
INGREDIENTES:
- 1 manojo de espárragos verdes
- 2 huevos
- 1 rebanada de pan de pueblo del día anterior
- 2 dientes de ajo
- 1 cebolleta
- 1 vaso pequeño de vino blanco
- 1 cucharada sopera de vinagre
- 1 cucharada de pimentón dulce
- 1 cucharadita de pimienta negra molida
- 1 cucharadita de comino
- Aceite de oliva virgen extra
- Agua
- Sal
ELABORACIÓN:
Se pone al fuego – fuego medio – una
sartén con aceite (que cubra el fondo nada más) y cuando empiece a estar caliente
se añaden los dientes de ajo enteros, previamente pelados, y la rebanada de
pan. Cuando ajos y pan estén dorados, los retiramos y reservamos en un plato,
sobre papel de cocina, para que absorba el aceite sobrante.
Mientras tanto, se pica la
cebolleta en trozos pequeños.
Se quita un poco del aceite de la
sartén (se deja como tres cucharadas) y se añade la cebolleta picada. Se deja
pochar aproximadamente 10 minutos.
Mientras se dora la cebolleta, se
pone en el mortero una cucharadita de sal, la cucharada de pimentón dulce, la
pimienta negra y el comino.
Una vez pochada la cebolleta, se
agregan los espárragos cortados en trozos y se rehogan otros 5 minutos.
Se incorpora agua solo hasta cubrir
los espárragos. Se pone un poco de agua en el contenido del mortero, diluimos y
vertemos sobre los espárragos.
Con una cuchara de madera se
mezcla todo bien y se deja cocer, hasta que los espárragos estén tiernos.
Cuando el caldo empiece a hervir, se prueba de sal y comino, rectificando si fuese
necesario.
Con los espárragos ya tiernos
cascamos dos huevos sobre el guiso, tapamos la sartén y se deja al fuego 1
minuto más. Se aparta del fuego y se deja reposar, tapado, otros 3 minutos.
Listo para comer.
El tiempo de cocción del espárrago dependerá de su grosor.
Si se tuviera la oportunidad de conseguir espárragos trigueros silvestres, sería
genial para este guiso.
Aunque depende del gusto de cada uno, no es conveniente usar mucha cantidad
de cada especia, pues enmascararía el sabor del espárrago.
Se puede presentar con el huevo encima o por el contrario con el huevo
revuelto con los espárragos(foto principal).
También se puede (un poco antes de terminar de cocer los espárragos) distribuir el guiso en cazuelas individuales y cascar el huevo encima.
Para los amantes del sopeteo dejar menos tiempo de cocción, así saldrá un guiso más caldoso.
También se puede (un poco antes de terminar de cocer los espárragos) distribuir el guiso en cazuelas individuales y cascar el huevo encima.
Para los amantes del sopeteo dejar menos tiempo de cocción, así saldrá un guiso más caldoso.