sábado, 28 de septiembre de 2013

Ensaladilla rusa



Para 4 personas

INGREDIENTES:
  • 1 kilo de patatas
  • 5 huevos
  • 3 latas de atún en aceite
  • 1 bote o lata de pimiento morrón
  • 1 bote de mayonesa
  • 100 gramos de gambas
  • 1 lata de aceitunas rellenas
  • Sal


ELABORACIÓN:
Ponemos un recipiente al fuego con agua. Cuando el agua empiece a hervir añadimos los huevos, cuidando de no quemarnos, y dejamos cocer durante 10 – 12 minutos. Apartamos del fuego y refrescamos en el grifo con agua fría. Les quitamos la cáscara y reservamos.



Pelamos las patatas, las lavamos bien y cortamos en trozos.


En una olla con abundante agua y dos cucharaditas de sal añadimos las patatas, que dejaremos cocer durante 20 – 25 minutos hasta que las patatas estén tiernas. Apartamos, escurrimos y dejamos enfriar.


En un bol grande ponemos: las 3 latas de atún escurrido de su aceite, la mitad de las aceitunas partidas en trozos, 3 huevos también cortados en trozos y la mitad del pimiento morrón también troceado.


A continuación, añadimos las patatas y la mayonesa.


Vamos machacando y mezclando todo el contenido con un tenedor o en nuestro caso con las manos (eso sí,  siempre muy limpias), hasta obtener una masa homogénea.


Le agregamos las gambas cortadas en trocitos y volvemos a mezclar, esta vez con cuidado. Reservamos algunas gambas para decorar.
Colocamos la ensaladilla en el plato o bandeja que vayamos a servirla, y le damos la forma que más nos convenga. Cubrimos ligeramente con mayonesa y la adornamos con alguno o con todos los ingredientes que hemos reservado (gambas, aceitunas, huevo y pimiento morrón).

  




El tiempo de cocción de las patatas dependerá del tipo y tamaño de las mismas. Para saber si las patatas están cocidas iremos pinchando con un tenedor y cuando las patatas no se queden adheridas al mismo es que están listas.
Las patatas (lavadas bajo el grifo) también las podemos cocer con su piel. En este caso, podemos agregar en el mismo recipiente los huevos, que sacaremos a los 10 minutos, a partir de que el agua empiece a hervir. Con esto ahorramos tiempo, agua y energía. Las patatas las pelaremos cuando estén templadas.
Las aceitunas las podemos utilizar rellenas de anchoa o de pimiento.
En casa de nuestras madres la ensaladilla siempre se ha hecho así, machacando todos los ingredientes menos las gambas. Otra opción es cortar las patatas en dados pequeños y picar fino el resto de los ingredientes. También hay quien le añade zanahoria cocida, cortada también en dados pequeños, y guisantes cocidos.
La cantidad de mayonesa que añadamos a la ensaladilla dependerá  del gusto de cada uno (teniendo en cuenta que aporta muchas calorías); pero no debemos quedarnos cortos, porque la ensaladilla nos quedará seca, ni pasarnos en exceso pues en este caso quedará demasiado empalagosa.
Las gambas las podemos cocer nosotros mismos o, como en nuestro caso, comprarlas cocidas, peladas y congeladas.
Al ir el atún escurrido de su aceite, utilizaremos latas de atún en aceite de girasol que son más económicas.

Antes de añadirle sal a la ensaladilla la probaremos; porque debemos tener en cuenta la sal que contienen las aceitunas, el atún, las gambas y la que hemos añadido para cocer las patatas. 

domingo, 22 de septiembre de 2013

Rulo de tortilla con jamón y queso



INGREDIENTES:
  • Huevos
  • Jamón en lonchas finas
  • Queso fresco de untar
  • Leche entera
  • Pimienta negra molida
  • Comino
  • 1 diente de ajo
  • 2 ó 3 ramas de perejil
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal


PREPARACIÓN:
Ponemos una sartén al fuego con media cucharada de aceite de oliva.


En un plato hondo ponemos: 1 huevo, 2 cucharadas de leche, una poco de pimienta negra molida, un poquito (muy poco) de comino molido y una pizca de sal.


Batimos para que se mezclen bien todos los ingredientes.


Cuando el aceite esté caliente agregamos el huevo; dejamos hacer hasta que veamos que la parte que pega a la sartén está cuajada. En ese momento, tapamos la sartén con un plato o una tapadera y le damos la vuelta a la tortilla. Dejamos hasta que cuaje.


Reservamos la tortilla en un plato plano donde la dejaremos enfriar.


Hacemos esta operación tantas veces como rulos queramos hacer.
Machacamos en un mortero un diente de ajo y unas ramas de perejil. Añadimos el majado al queso fresco y lo mezclamos.
Una vez que las tortillas hayan enfriado untamos, una a una por toda su superficie, con el queso al ajo y perejil.


A continuación, las cubrimos con las lonchas de jamón serrano.


Hacemos rulos con cada una de las tortillas que envolveremos en films transparente.



Metemos en el frigorífico unas 3 horas, o 30 minutos en el congelador, hasta que endurezcan. Una vez duros quitamos el envoltorio y cortamos, con un cuchillo de sierra, en rodajas de un centímetro. Se deben de cortar con mucho cuidado para que no se nos rompan.







El poner muy poco comino se debe a que es una especia con un sabor bastante intenso, y un toque ligeramente amargo. Si no nos gusta su aroma y sabor simplemente lo suprimimos. Esta especia se utiliza bastante en la cocina del sureste andaluz.
Por supuesto se puede usar leche desnatada o semidesnatada.
Como se puede ver usamos un queso con ajo y perejil, que descubrimos en un supermercado, comercializado por la marca San Millán.
Es importante que a la hora de trabajar con las tortillas estén frías; si no lo están se nos romperán.
Siempre hacemos los rulos con anterioridad y los congelamos; de esta forma, los podemos utilizar en el momento que queramos. Cuando los vamos a consumir los sacamos, y congelados, los cortamos en rodajas (de esta forma se cortan mejor y no se nos deshacen) y dejamos descongelar en el recipiente en el vayamos a servirlos. 
La opción del frigorífico es para cuando queremos consumir los rulos en el mismo día.

También podemos utilizar salmón ahumado o marinado, que sustituiríamos por el jamón, siguiendo el mismo procedimiento.       

lunes, 16 de septiembre de 2013

Enrollado de jamón y queso



INGREDIENTES:
  • 8 lonchas de jamón serrano
  • 8 lonchas de queso Emmental
  • 125 gramos de paté al Oporto
  • 50 gramos de mantequilla
  • 2 cucharadas soperas de brandy
  • 40 gramos de almendras tostadas y picadas
  • 1 cucharada de mayonesa
  • Una pizca de pimentón dulce
  • Una pizca de azúcar



ELABORACIÓN:
Picamos finas las almendras.


En un recipiente colocamos el paté, la mantequilla reblandecida, el brandy (opcional) y media cucharadita de las de café de azúcar. Machacamos y mezclamos todo bien hasta obtener una pasta homogénea.


Añadimos las almendras picadas y removemos hasta que se integren bien.


Sobre las lonchas de jamón extendemos la mezcla.


Cubrimos con el queso y enrollamos.


Liamos en film transparente y metemos en el frigorífico durante aproximadamente 3 horas. 


Pasado el tiempo, sacamos del frigorífico, quitamos el film y cortamos con un cuchillo de sierra en rodajas del grosor que queramos.
Decoramos con pimentón dulce y acompañamos con una cucharada de mayonesa (opcional) y unos triángulos de maíz.










Las almendras las podemos comprar tostadas o bien tostarlas nosotros (almendras tostadas con microondas).
Tanto el coñac o brandy como la mayonesa son opcionales; en esta receta no hemos utilizado el licor.
Tanto el jamón como el queso lo compramos ya envasado y cortado en lonchas finas.
Siempre que podemos utilizamos jamón de nuestra tierra, “de Granada”.
Se puede utilizar también queso gruyer, y si no nos agrada ninguno de estos, utilizamos uno que nos guste.
Si por su contenido en grasa no queremos utilizar mantequilla la sustituimos por margarina vegetal.
Los rulos los podemos hacer de dos formas: bien con una sola loncha o también uniendo, a lo ancho, dos lonchas una a continuación de otra.
El motivo de meterlos en el frigorífico es para que se endurezcan y así poder cortarlos mejor. Si queremos acortar el tiempo los meteremos en el congelador durante aproximadamente 30 minutos.
Nosotros lo que hacemos con los rulos es congelarlos directamente.
Cuando los vamos a consumir los sacamos, y congelados, los cortamos en rodajas (de esta forma se cortan mejor y no se nos deshacen) y dejamos descongelar en el recipiente en el vayamos a servirlos. 
La cantidad de los ingredientes variará dependiendo del número de enrollados que queramos hacer.




viernes, 6 de septiembre de 2013

Croquetas de jamón serrano



INGREDIENTES:
  • 125 gramos de jamón serrano
  • 1 cebolla mediana
  • 2 cucharadas soperas de harina de maíz (maicena)
  • 6 cucharadas soperas de harina de trigo
  • Nuez moscada
  • Pimienta blanca molida
  • 4 cucharadas soperas de aceite de oliva
  • 875 mililitros de leche entera (para la harina de trigo)
  • 125 mililitros de leche entera (para la maicena)
  • Sal

Para rebozar:
  • Harina
  • Pan rallado
  • 3 huevos

Para freír:
  • Aceite de girasol



ELABORACIÓN:
Pelamos y picamos finamente la cebolla. Picamos a taquitos finos el jamón.
Ponemos una sartén al fuego – fuego lento – a la que añadimos 4 cucharadas soperas de aceite de oliva. Cuando el aceite empiece a calentar añadimos el jamón y rehogamos durante 1 minuto aproximadamente. Lo sacamos de la sartén escurrido de aceite y reservamos.


A ese mismo aceite incorporamos la cebolla y dejamos rehogar a fuego lento durante 10 minutos aproximadamente (tenemos que tener cuidado para que la cebolla no se nos dore).


Cuando veamos que la cebolla está hecha añadimos la harina; subimos el fuego (fuego medio) y rehogamos unos instantes para que la harina pierda el sabor a cruda.


Añadimos el jamón y le damos unas vueltas.


Seguidamente, vamos vertiendo la leche poco a poco. Primero añadimos un poco (como medio vaso de los de agua) e iremos removiendo constantemente; cuando veamos que va ha ser absorbida echamos otro poco y removemos sin parar, continuando así hasta agotar la leche.


Le incorporamos un poco de pimienta blanca molida, un poco de nuez moscada rallada y una pizca de sal.


En un vaso de los de agua, ponemos medio vaso de leche con dos cucharadas de maicena; disolvemos bien y agregamos a la sartén.


Seguimos removiendo y cuando veamos que la masa empieza a  despegarse de las paredes de la sartén apartamos del fuego, y la pasamos a una fuente u otro recipiente para que se vaya enfriando.


Si no vamos ha hacer las croquetas inmediatamente (la masa debe de estar fría), tapamos la masa con papel transparente y una vez fría la metemos en el frigorífico.
En el momento de hacer las croquetas sacamos la masa del frigorífico. Dejamos que se temple un poco y con dos cucharas cogemos porciones a las que daremos un poco de forma.


Preparamos tres recipientes: uno con harina; otro con los huevos batidos y el tercero con el pan rallado.
Pasamos las porciones de masa primero por harina; a continuación, por huevo y por último por pan rallado, a las que haremos rodar con la palma de la mano; terminaremos de darle forma a las croquetas con las manos.


Ponemos una sartén al fuego con abundante aceite (en este caso de girasol). Cuando el aceite esté bien caliente vamos añadiendo las croquetas, que freiremos hasta que adquieran un ligero color dorado (de 1 a 2 minutos dependiendo de si las queremos más o menos doradas).


Sacamos y dejamos escurrir en un plato o bandeja con papel absorbente.








El jamón lo compramos picado y envasado en Mercadona.
La incorporación de la maicena es para que las croquetas nos queden blanquitas por dentro.
Tenemos que tener cuidado con la sal, el jamón serrano ya lleva.
A última hora, en vez de pimienta blanca hemos utilizado pimienta negra.
Con la masa obtenida nos sale una cantidad importante de croquetas (70), con lo cual, utilizaremos las que nos vamos a comer en ese momento y el resto las congelamos para utilizarlas en otra ocasión. 


La cantidad es relativa ya que dependerá del tamaño que le demos a cada croqueta.
Si no queremos tanta cantidad bastará con reducir los ingredientes, de forma proporcional, hasta ajustarnos a la cantidad que queramos.
Para freírlas hemos utilizado aceite de girasol, pero si utilizáis aceite de oliva mucho mejor.
Las croquetas las hemos acompañado con un poco de mayonesa.

Hay que tener en cuenta a la hora de freírlas que todos los ingredientes ya están cocinados excepto el pan rallado.